INFORMES SIBER
( TRIGO)
( SOJA LINO)
( TRIGO SOJA SORGO)
( ARROZ GIRASOL SORGO)
últimas 4 semanas 
A lo largo de la última semana, nuevamente se han observado lluvias, aunque sin la continuidad y el ambiente húmedo que había sido la característica dominante en las semanas anteriores. Como podemos observar en el mapa, los máximos se observan en áreas reducidas, Federal y Feliciano con un comportamiento más homogéneo corrido hacia la abundancia. Los cambios del viernes para el sábado y del domingo para el lunes fueron los momentos de mayor inestabilidad. Como vemos, en muchas áreas de la provincia, los acumulados pluviales no fueron significativos, incluso en un vasto corredor sobre el río Uruguay no se han registrado precipitaciones.
Durante el lunes las condiciones ambientales cambiaron con la llegada de aire más fresco y seco. Por estos días se ha reconstituido parcialmente la presencia de aire húmedo de origen tropical, al tiempo que comienzan a transitar nubes que encuentran condiciones para su desarrollo. Es razonable esperar que dentro de este contexto y así lo muestran los pronósticos, reaparezcan las lluvias. Hacia la noche de hoy o durante la madrugada del viernes, las mismas deberían afectar el centro sur de la provincia y avanzando sobre el viernes, hay ambiente como para que las precipitaciones se potencien en forma de tormentas del centro para el norte provincial. Este evento sería el último del año.
En el resumen del mes de diciembre, toda la provincia ha tenido precipitaciones por encima de los valores normales. Áreas del sur de Paraná, sur de Nogoyá, norte de Diamante, son las que se han quedado con acumulados más cortos, por debajo de los 200 milímetros (piso de 150mm). En el resto de la provincia las marcas son mucho más generosas, con promedios que tienden a quedar cerca de los trescientos milímetros. La estación de Mojones Norte, ha registrado el acumulado mayor del mes con un valor de 553 milímetros. El efecto del fenómeno de El Niño fue muy marcado en este mes de diciembre.
últimas 4 semanas
Las reservas de humedad se presentan con niveles satisfactorios en casi todo el territorio. Evidentemente las zonas bajas deben todavía mantener excesos hídricos y no en pocos sectores debe haber problemas de saturación superficial de los lotes y seguramente problemas con los caminos rurales. Este es un costo que habitualmente se paga en condiciones de tanta continuidad de lluvias y con tan poca insolación entre eventos pluviales. Posiblemente en algunas zonas esto haya complicado el cierre de las tareas de implantaciones tardías.
Si bien la realidad a campo puede presentar los problemas que describimos, es bueno contar con margen de humedad en los perfiles para enfrentar posibles salteos semanales que pueden surgir durante el mes de enero. Por lo pronto, esta situación es poco probable, pero debemos atender esta posibilidad en tanto que es difícil mantener a lo largo de un periodo extendido un piso de lluvias homogéneo que permita sostener las reservas en niveles de suficiencia. A pesar de que el fenómeno de El Niño seguirá presente, pueden darse situaciones de mayor estabilidad, las cuales conducirán a condiciones atmosféricas exigentes, presionando rápidamente sobre las reservas de humedad. Esto se ha visto durante la última semana, con una disminución de los eventos pluviales y un rápido retroceso de los excesos hídricos.
Para estas fechas del año pasado, las condiciones ambientales se presentaban antagónicas. La transición interanual fue muy extrema, con olas de calor qua afectaron gran parte del país. Por estas fechas la interacción entre masas de aire tropical y la llegada de masas de aire desde el sur generan un ambiente mucho más moderado. Esto no quiere decir que a lo largo del verano no vayamos a tener olas de calor, pero es muy poco probable que tengamos el nivel de exigencia térmica de la temporada pasada. Con reservas algo holgadas, lluvias recurrentes y temperaturas moderadas, la proyección productiva 23/24 es favorable.
En la provincia de Entre Ríos, la siembra de soja de primera cubrió el 91 % del área total estimada en 400.000 ha para el ciclo 2023/24. No obstante, se destaca que, hasta el 7 de diciembre, el avance registrado era del 78 %, lo que implica un aumento del 13 % en las últimas tres semanas. El modesto incremento se atribuye a las importantes precipitaciones que detuvieron las labores y obligó a los agricultores a ubicar parte del área fuera del periodo óptimo.
En cuanto a la siembra de soja de segunda, se ha logrado un avance del 57 %, sobre una proyección de aproximadamente 620.000 ha. En este caso, se observa un incremento del 22 % en las últimas tres semanas. La región Oeste destaca por presentar el mayor progreso en ambas siembras, mientras que las zonas Norte y Este experimentan mayores dificultades debido a los excesos hídricos.
Es relevante señalar que las precipitaciones han generado inconvenientes significativos en el establecimiento de ambos tipos de soja. Entre los problemas identificados se encuentran: podredumbre de semilla, encharcamiento y planchado del suelo, resultando en fallas en las emergencias. Como consecuencia, se observan lotes con bajo stand de plantas y otros que requieren de resiembra parcial o total. Estas dificultades, a la cual se le suma la faltante de semilla de la oleaginosa, tendrían un impacto negativo en el área total destinada a soja, ya que los productores están evaluando la posibilidad de destinar estas tierras a otros cultivos de verano, como el maíz tardío y/o de segunda o sorgo.
En Entre Ríos se inició la siembra de maíz de segunda y/o tardío, a nivel provincial el avance de las labores es del 29 %.
Para esta nueva campaña se estima un área total de 70.000 ha, es decir que la misma presentaría un incremento del 6 % respecto a la campaña pasada en la cual se sembraron 65.800 ha.
Es importante mencionar que, el incremento podría ser aún mayor, si se concreta el paso de lotes con rastrojo de trigo, que iban destinados a soja de segunda, pero el retraso en la siembra está moficando el área planificada originalmente.
