Ha transcurrido otra semana en que las lluvias estuvieron ausentes en la mayor parte del territorio entrerriano.  Modestas excepciones se representan en el mapa y corresponden a precipitaciones ligeras observadas en la madrugada del miércoles.
Si bien en la jornada de ayer las coberturas nubosas  fueron extendidas y tomaron gran parte de la provincia, el sistema frontal no generó la inestabilidad necesaria para que las mismas ganen desarrollo vertical. Consecuentemente solo en forma muy dispersa y mayormente en la zona representada en el mapa, se registraron algunas lloviznas, las cuales sobre el Uruguay se transformaron en lluvias algo más destacadas.
El mes de agosto ha comenzado con ambiente mas confortable que lo que se venía observando en las últimas semanas de julio; al menos el rigor de las temperaturas se ha moderado.
La semana que transcurre posiblemente se mantenga libre de precipitaciones. Se está configurando un patrón similar al observado en julio, es decir una tendencia a completar valores normales de precipitación pero con baja frecuencia de eventos. Es posible entonces, que la primera quincena del mes cierre mayormente seca, con una tendencia más favorable para la segunda quincena donde se concretarían las precipitaciones más destacadas.
Las masas de aire húmedo y la zona más activa se mantienen en el extremo noreste del país, sur de Brasil y la zona agrícola de Paraguay.

Luego de dos semanas sin precipitaciones, las excesivas reservas superficiales se han ido incorporando al perfil, favoreciendo un estado óptimo de reservas en gran parte del centro sur de la provincia. El balance hídrico es más ajustado hacia el norte, aunque prevalecen reservas adecuadas considerando el promedio del primer metro de suelo.
Teniendo en cuenta la disponibilidad actual de agua, las necesidades hídricas de los cultivos estarían satisfechas en las próximas dos semanas aun sin que se registren precipitaciones. Este escenario no es tan cierto para los departamentos del norte, donde la demanda igualmente no es demasiado importante. Es poco probable que la segunda quincena del mes de agosto se mantenga libre de precipitaciones.
Durante el mes de julio la mayor parte de la provincia, exceptuando sectores del norte han completado las lluvias normales, con vastos sectores del sur donde se observaron corrimientos positivos.  Estos acumulados se lograron prácticamente en un solo evento.  En esta época del año no es perjudicial que las precipitaciones se concentren en cortos períodos húmedos a lo largo del mes, sin embargo sí genera mayores problemas cuando los cultivos comienzan a tener demanda y las exigencias atmosféricas aumentan. En este sentido sería bueno que la última parte de agosto muestre un aumento en la frecuencia de precipitaciones para lograr los acumulados normales.  De esta manera se consolidaría un  comportamiento pluvial que ya es favorable para la provincia y que tiene por delante un muy buen escenario hídrico para la floración del trigo y el inicio de las siembras de la campaña gruesa.

El siguiente cuadro compara los datos estadísticos finales de trigo, lino, girasol, maíz, soja, sorgo y arroz de las últimas campañas agrícolas en Entre Ríos.

El siguiente informe fue elaborado por la Consultora Climatológica Aplicada CCA.

"PROYECTANDO EL INICIO DE LA GRUESA"

Con el este recuperado de la sequía, se mantienen las incertezas sobre la franja mediterránea para el inicio de las siembras de maíz.

SE MANTIENEN LAS DIFERENCIAS
Luego de las lluvias de comienzo de la semana pasada, las reservas del primer metro de suelo experimentaron una importante mejoría en los sectores  del noreste de BA y sudoeste entrerriano, incluso generando encharcamientos superficiales. El centro sur de SF con reservas aún más ajustadas, también se inscribe entre las zonas beneficiadas. La oferta de agua no fue eficiente sobre CB, LP y una buena parte del oeste de BA. De esta manera se mantienen o incluso se acrecientan las diferencias en el nivel de reserva del este y el oeste.

Es posible considerar que gran parte del centro sur de SF haya alcanzado reservas adecuadas. Es decir, en este sector es muy probable que la categoría regular se extienda internándose más en territorio cordobés, con lo cual, al sur de Rafaela la disponibilidad de agua útil en el promedio del primer metro de suelo debe ser  adecuada. Las reservas en la provincia de CB mejoraron superficialmente gran parte de la franja este, sin embargo fueron insuficientes para  como para que este beneficio se extienda a las capas más profundas. De esta manera la demanda hídrica es aun muy importante
UN ESCENARIO NORMAL
Considerando el estado de reservas actual como situación de partida, podemos simular como evolucionarán las mismas si se presenta un escenario normal de precipitaciones durante los próximos cuarenta y cinco días. Es interesante ver entonces, cual es la distribución y la oferta normal de agua durante este período (1973-2008).

Obviamente la realidad no respeta la prolijidad con que se despliegan las isoyetas, sin embargo es un indicador básico que permite plantear el devenir del próximo mes y medio. Como queda claro las lluvias más importantes todavía se mantienen sobre el este, es decir sobre la zona que actualmente está mejor de humedad. La isolinea de hasta 50 milímetros se extiende hasta el límite de CB. La demanda de agua para una pradera supera la oferta normal que eventualmente podría lograrse y de esta manera se plantea una dificultad evidente de cara a recuperar el perfil de humedad en las zonas maiceras de CB, norte de LP y noroeste de BA.
Las precipitaciones ocurridas durante el otoño y lo que va del invierno han tenido una clara preferencia por la franja este. De esta manera la distribución estadística está encontrando en la dinámica atmosférica una aliado que la fortalece como indicador. Es decir se han observado anomalías en cuanto a la oferta de agua (corrimientos positivos), pero no en la distribución. Lo normal en éste caso ha sido contrario a lo necesario y esto no hace más que validar las perspectivas que desde comienzos de mayo se planteaban en cuanto a las serias dificultades que enfrentaba toda la franja mediterránea del país para transitar el invierno, fundamentalmente para el desarrollo de la actividad agropecuaria en general. La mínima implantación de trigo confirma lo que parece ser el último impacto de la seca 08/09.
Considerando que las siembras tempranas de maíz comienzan en la primera quincena de septiembre, creemos razonable estimar las reservas para mediados de aquel mes.

Planteando un escenario optimista, es decir con lluvias normales en los próximos 45 días, las siembras tempranas de las zonas mediterráneas parecen complicadas. Debe considerarse sin embargo, que se están simulando reservas considerando como cobertura una pradera. Un campo con buen barbecho puede estar en mejor condición y posiblemente las reservas superficiales no sean tan malas hasta entonces. El riesgo subyace al considerar las reservas profundas.
La franja este de CB y el noroeste de BA, deberían estar en condiciones de riesgo razonable para encarar siembras de maíz si se suman los cuarenta o cincuenta milímetros previstos por la estadística. Con esta oferta de agua los primeros treinta centímetros de suelo estarían con humedad suficiente para sembrar, aunque quedarán dependientes de la performance de lluvias del comienzo de primavera. La situación es más compleja hacia el oeste y con mayor margen hacia el este, donde básicamente no habría problemas para iniciar en fecha las siembras.
En conclusión, la zona núcleo maicera claramente se presenta dividida proyectando el inicio de las siembras. Las cuestiones comerciales y de mercado también pueden inclinar negativamente la balanza para el maíz, planteándose cada vez con mayor firmeza un escenario favorable para que la soja gane territorio.

Una ola primaveral hizo más agradable los últimos siete días. Las temperaturas máximas treparon hasta llegar casi a los 22ºC, las mínimas más bajas solo estuvieron levemente por debajo de 0ºC y solo durante un par de los días considerados. Gracias a estos importantes incrementos las temperaturas medias diarias se ubicaron cerca de los 11ºC, muy lejos de los 6ºC registrados durante el periodo anterior.

Semana sin lluvias pero con un considerable aumento de la humedad del aire. La nubosidad registrada disminuyó la tasa de radiación solar media pero no lo suficiente para evitar días con una cuota de sol pleno y la acumulación de valores de grados/día razonables. Las horas de mojado foliar acumuladas se mantuvieron elevadas debido al aumento de la condensación producto del ascenso de las temperaturas y la elevada humedad relativa ambiente.