Desde el miércoles de la semana pasada las condiciones meteorológicas favorecieron la persistencia de una masa de aire húmedo, no solo en la provincia de Entre Ríos, sino en gran parte de la región pampeana. Bajo estas circunstancias las lloviznas alternaron durante gran parte de estos últimos días de julio, intensificándose sobre el noreste entre miércoles y jueves, repitiendo precipitaciones más intensas durante el último martes.
El sucesivo pasaje de perturbaciones ha promovido la continuidad de coberturas nubosas que aunque alternadas, definieron la condición dominante de la última semana. La situación aun no se modifica sustancialmente dado que la masa de aire no ha experimentado cambios de importancia. Si bien la Mesopotamia es una región donde el aire húmedo se sostiene con mayor facilidad, en esta época del año estas masas de aire suelen mostrar mayor grado de alternancia con flujos de aire proveniente de la meseta patagónica, por ende las jornadas húmedas usualmente no tienen esta persistencia. Dentro de este contexto podemos decir que no se han dado sistemas precipitantes de volúmenes destacados, salvo en áreas reducidas. Esto refleja el aplacamiento de la dinámica atmosférica, tal como corresponde a la época del año.
En resumen, la disponibilidad de humedad en la atmósfera no fue limitante para el desarrollo de sistemas precipitantes y todo indica que la jornada de hoy cerraría con precipitaciones generalizadas en el territorio entrerriano, lo cual aún podría observarse durante la jornada de mañana. Sería satisfactorio que la oferta de agua alcance el centro norte y el noroeste provincial donde las precipitaciones han sido más escasas.
El cambio de masa de aire solo comenzará a sentirse con durante el transcurso del fin de semana.