Durante la última semana la provincia de Entre Ríos quedó posicionada en una situación de transición entre el frío riguroso que dominó el sur de la región pampeana y las masas de aire húmedo ubicadas en el noreste del país. Esta situación devino en una alternancia de condiciones meteorológicas, fundamentalmente con variabilidad en las coberturas nubosas, con algunas jornadas más frías, fundamentalmente cuando el aire del sur logró posicionarse en la franja central del país. Igualmente, dentro de la región centro, las temperaturas fueron más bajas en SF y CB.
Dentro de este contexto se concretaron algunas lloviznas, que en general fueron registradas por las estaciones automáticas. Solo en algunos casos las marcas superaron el milímetro de lluvia.
Los principales sistemas precipitantes se han retirado hacia el extremo noreste del país. Si bien esto es normal durante el trimestre frío, por lo general la provincia de ER, suele tener una oferta de agua más generosa. Durante lo que va de junio solo sectores del departamento Paraná han recibido lluvias que pueden considerarse normales, en el resto de la provincia, los acumulados han quedado deficitarios y es poco probable que se modifiquen en estas últimas jornadas.
Si bien el este del NEA y la provincia de Corrientes han logrado sumar mayor cantidad de lluvias, las lluvias sobre abundantes se concentran en el este de Paraguay y el norte de Misiones, de hecho el Río Iguazú está acusando una crecida muy inusual, luego de que se registraran más de 300 mm en la zona, comportamiento que se replica hacia el norte y ha comenzado a reflejarse en el Río Paraná. Esta condición fluvial puede generar problemas en el corto plazo en las costas entrerrianas.