La humedad del suelo entrerriano persiste en valores satisfactorios, con franjas en niveles óptimos, apareciendo sobre el sudeste algunas zonas con excesos. La situación es apta para la implantación de cultivos en la fina, más que nada en el sudoeste de la provincia donde por lo general el área implantada es mayor.
Las perspectivas de tiempo seco para los próximos días, se adapta a la demanda de aquellos productores que están llevando adelante tareas de siembra o tienen pensado hacerlo. Las circunstancias limitantes parecen restringirse a aspectos extraclimáticos, como la falta de semilla o variables vinculado a lo financiero o lo político.
La foto actual es muy favorable en cuanto a disponibilidad de humedad. Si además tenemos en cuenta que ingresamos en el mínimo de radiación, las pérdidas de humedad se limitan y solo aparece el viento como un elemento que eventualmente produce desecamientos superficiales. No obstante esto, un cultivo con buen arranque y que gane raíces en forma perentoria, encontrará humedad suficiente para su desarrollo. Por otra parte este comienzo seco del mes de junio, es probable que no se sostenga más allá del jueves o viernes de la semana próxima.
Suponiendo que se concretan las lluvias de mantenimiento del invierno, la salida a la primavera de los cultivares implantados no se verá presionada por una demanda importante de precipitaciones. Cuenta a favor que como escenario de largo plazo, los indicadores oceánicos proyectan la neutralidad como la transición más probable hacia la primavera. Por lo tanto el ingreso a floración de la fina de ER, quedaría en principio expuesta a la aleatoriedad de la distribución temporal de las lluvias, no así a su volumen, el cual resultaría favorable.