Cambiando del miércoles para el jueves de la semana pasada se observaron precipitaciones en todo el territorio entrerriano. En gran parte de la provincia el evento tuvo una oferta satisfactoria, sin embargo debemos considerar que este fue apenas el segundo evento pluvial de importancia del mes.
Las lluvias que se representan en el mapa definen algunas zonas mejor provistas que otras, mayormente ubicadas en los departamentos del oeste.
La consolidación de un patrón pluvial con mayor distanciamiento entre eventos ha forzado un aumento en la demanda pluvial. En lo que va del mes es difícil encontrar localidades que superen los 100 milímetros, en muchos casos, principalmente en el este de la provincia, apenas se ha sumado la mitad de esta marca. Es decir, noviembre ha mostrado un claro retroceso en la oferta de agua y esto coincidió con jornadas donde han predominado altos niveles de radiación y ocasionalmente períodos con registros térmicos por encima de los valores normales. En resumen, las condiciones meteorológicas se han vuelto más exigentes y notablemente diferenciadas de lo que fue la sobreoferta de agua de octubre.
Este marcado cambio en el comportamiento pluvial nuevamente pone de manifiesto las volátiles condiciones a las que queda expuesto el desarrollo de los diferentes cultivos del semestre cálido y si bien los cultivos no transitan períodos de definición, es necesario que la transición hacia diciembre muestre una mejora en la oferta de agua.
Actualmente se observan condiciones muy inestables en el centro del país. Un centro de baja presión se desplaza desde Córdoba y el norte de Buenos Aires, avanzando por Santa Fe hacia el NEA. En principio la provincia de Entre Ríos, recibiría las lluvias marginales de este evento.