La franja seca del norte se viene afianzando al paso que las lluvias van dejando deficitaria la ecuación de balance hídrico, es decir, aún teniendo en cuenta la época, la perdida de humedad de los suelos no logran reponerse con el actual nivel de precipitaciones.
Dentro de este contexto, la zona más afectada es la que va desde el sur de La Paz hasta el noreste de Villaguay, tomando buena parte del sur de Federal. Este sería el epicentro de la sequía, pero en rigor, la falta de agua se nota en una franja cada vez más grande del norte de la provincia, y que se insinúa en reservas regulares sobre Nogoyá y el norte de Tala, manteniéndose el resto del área en niveles adecuados. De hecho, las recientes lluvias aunque modestas, han logrado sostener este nivel de reserva; sin embargo hay que destacar que la necesidad de precipitaciones es también importante en este sector.
De sur a norte la demanda de agua aumenta, por lo cual sería muy beneficioso que las lluvias del domingo o del comienzo de la semana próxima, tengan una cobertura de importancia. Dada la época no son necesarias precipitaciones abundantes para revertir la situación. No es improbable que se concreten precipitaciones del orden de los 30 milímetros. Este nivel de agua sobra en los departamentos del sur, mientras que para el norte definiría un camino de salida de la seca.
Si bien en esta época del año la franja que actualmente se halla más afectada por la seca no presenta gran actividad, las pasturas deben estar perjudicadas y sería muy oportuno que esta situación comience a revertirse. Estimamos que la falta de precipitaciones en este sector de sequía y en general en toda la provincia, no es estructural Los elementos dinámicos muchas veces afectan las normal distribución de las lluvias, pero mientras la atmósfera se mantenga húmeda hay buenas perspectivas de mejora.