Las principales variables que resumen la producción de soja fueron:
- Superficie sembrada 1.059.600 hectáreas (ha)
- Superficie perdida 1.900 ha
- Superficie cosechada 1.057.700 ha
- Rendimiento promedio 2.375 kg/ha
- Producción 2.511.680 toneladas (t)
La superficie de soja en el ciclo 2021/22 experimentó un leve retroceso del 1 % (9.100 ha).
Por segundo año consecutivo, los meses estivales estuvieron regidos por un Pacífico Ecuatorial más frío que lo normal, es decir bajo la presencia de “La Niña”.
No obstante, el déficit hídrico más marcado se generó en el mes de diciembre, lo cual impactó negativamente en el rendimiento del maíz de primera, pero no en el periodo crítico para la oleaginosa (trimestre enero – febrero – marzo), donde las lluvias se ubicaron levemente por sobre el valor esperado.
Esta distribución de las lluvias posibilitó obtener un rendimiento muy superior al del ciclo 2020/21, donde el pulso seco se posicionó en el mes de febrero.
Si bien en el periodo crítico de la soja hubo lluvias acordes, el cambio comenzó a percibirse a partir de la segunda quincena de enero y por tal motivo, hubo sectores que no se cosecharon (no se detectó la pérdida total de lotes). El área total perdida fue de 1.900 ha, lo cual equivale al 10 % del total no cosechado en el ciclo 2020/21.
El rendimiento promedio provincial experimentó un crecimiento interanual del 35 % (617 kg/ha) y en relación al promedio del último lustro la variación fue del 14 % (297 kg/ha).
La producción de soja registró un crecimiento interanual del 36 % (665.750 t), lo cual es lógico, ya que no hubo una variación significativa en el área implantada, pero si un alza importante en el rendimiento.
Los datos estadísticos sobre la evolución del área implantada con soja en Entre Ríos se presentan en la Tabla 1.