INFORMES SIBER
últimas 4 semanas 
Durante el último fin de semana lluvias de milimetrajes muy pobres o en forma de lloviznas, que en muchos casos no dejaron registros, se observaron en el territorio entrerriano. El período de mayor inestabilidad se concretó cambiando del viernes para el sábado y durante parte de aquella jornada, para luego rápidamente observarse una mejora en las condiciones del tiempo con algún temporario descenso de temperatura, más evidente hacia el pasado lunes.
Las lluvias que se representan en el mapa, muestran algunos chaparrones más generosos en el extremo norte, como efecto marginal de un actividad algo más organizada en el noreste santafesino y el centro norte de la Mesopotamia. Sin embargo esta inestabilidad traducida en lluvias de mayor porte en aquella zona, apenas se expresó en coberturas nubosas y lloviznas en la mayor parte del territorio entrerriano, toda la franja agrícola del Uruguay y casi todo el norte y este de BA. Es decir se mantiene la estructura estable en las capas medias de la atmósfera en una vasta región del este y por lo tanto los desarrollos nubosos no logran extenderse en la vertical. En consecuencia y ya completando cinco semanas, seguimos transitando un período que se ha caracterizado por la escasez de lluvias.
En el informe de la semana pasada hemos comentado esta cuestión. Haciendo hincapié sobre ello, hoy podemos asegurar que las lluvias acumuladas luego del 4 de marzo en la provincia, quedan categorizadas como muy por debajo de los valores normales si se tiene en cuenta la estadística para este período desde 1973.
Se espera que a partir del fin de semana se ingrese en un período de mayor inestabilidad. El mismo debería favorecer el retorno de un patrón pluvial más generoso, aunque posiblemente para ello haya que esperar hasta el martes.
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El mapa que representa las reservas de humedad podría generar zozobra, si no estuviésemos en tiempo de cosecha. En efecto, el patrón pluvial deficitario se va reflejando en forma progresiva en el deterioro de la disponibilidad de humedad, la cual cae a nivel de sequía en la mitad este del territorio provincial. En apenas tres meses el sudeste entrerriano pasó de lidiar con los excesos hídricos a un estado donde la sequía se impone en la mayor parte de los lotes.
Como siempre mencionamos, posiblemente la situación sea menos ajustada para un cultivo que esta por ser cosechado. La hipótesis de una cobertura con una pastura de consumo permanente, es más exigente que la mayoría de las coberturas actuales, la cuales no presentan demanda. De todos modos el ejercicio es muy eficiente a la hora de monitorear como van descendiendo las reservas y sobre todo como este retroceso gana progresivamente territorio hacia el oeste.
Como decíamos, dado que la época en que la actividad de recolección está en plena efervescencia, esta situación hídrica pasa a segundo plano, es más, hasta resulta conveniente. El ingreso a los lotes, el transporte y el acopio de granos resulta altamente beneficiado por la persistencia de tiempo seco.
Más allá de ésto, sería altamente satisfactorio que se concreten las lluvias previstas para la transición entre quincenas. La interrupción en la cosecha sería sólo temporaria y los lotes comenzarían a recomponer al menos en forma parcial su perfil de cara a la fina. No olvidemos que aquellas sementeras con intenciones de hacer trigo, abren su ventana de siembra en la segunda quincena de mayo. Es decir desde el miércoles próximo solo resta apenas un mes para lograr que la humedad vuelva a niveles adecuados. En este sentido ganan significancia los pronósticos que anticipan estas lluvias, principalmente como señal de cambio de patrón.
Esta semana la cosecha de la oleaginosa alcanzó un avance del 19% del área total sembrada con soja de primera, que para el actual ciclo se ubicó en 1.177.700 ha.
El rendimiento promedio provincial se ubica alrededor de 2.900 kg/ha con mínimos de 1.600 kg/ha y máximos que superan los 3.500 kg/ha; lo cual indica una gran disparidad en cuanto a los valores obtenidos.
Es de destacar, la presencia de numerosos lotes con problemas de retención foliar y tallo verde. Esta condición del cultivo sumada a la baja humedad que presentan los granos puede complicar la cosecha, haciendo que se incrementen las pérdidas.
Fotos: Cosecha de soja de primera, gentileza de la Ing. Jorgelina Meier.
De acuerdo a los datos brindados por los Colaboradores, la cosecha de sorgo se ubica en el 46% de las 90.000 ha implantadas. El rinde promedio provincial se posiciona en los 4.800 kg/ha con mínimos de 3.600 kg/ha y máximos cercanos a 7.000 kg/ha. Cabe aclarar que los lotes cosechados corresponden principalmente a sorgo de primera.
La Bolsa de Cereales de Entre Ríos a través del SIBER da a conocer el reporte sobre el área total implantada con maíz en la geografía entrerriana durante la campaña agrícola 2014/15.
El siguiente informe ha sido elaborado gracias a la ayuda y buena interacción entre la Red de Colaboradores, el procesamiento de imágenes satelitales SPOT 5 (brindadas por convenio por CONAE http://www.conae.gov.ar/), AWIFS y LISS 3 (brindadas por INPE http://www.inpe.br/) y LANDSAT 8 OLI (brindadas por USGS http://earthexplorer.usgs.gov/); junto con salidas a campo efectuadas por los profesionales de la Institución.
La superficie sembrada con el cereal experimentó una caída del 4,5%, situándose el área total en 252.100 ha, esto representó una merma de 12.000 ha en relación al año pasado.
Para acceder al informe completo cliquear en el siguiente link
