Durante la última semana, el buen tiempo predominó no solo en la provincia de ER, sino también en toda la zona núcleo. Esto posibilito el afianzamiento de las tareas de cosecha, las cuales seguramente se debieron acomodar a los niveles de humedad con que comenzaron las diferentes jornadas, para optimizar el proceso de almacenamiento de los granos.
Algunas lloviznas menores se fueron intercalando producto de nubes bajas devenidas de algunas nieblas. En general estas lluvias solo fueron registradas por las estaciones meteorológicas automáticas y en muchos casos, los registros han sido producto de condensaciones en los pluviómetros que no necesariamente se observaron en forma de lloviznas. Igualmente estos datos enmarcan algunas dificultades por excesos de humedad que seguramente aparecieron a lo largo de la última semana de labores. El período de mayor inestabilidad se observó cambiando del lunes para el martes, con el tránsito de una perturbación que se desplazó desde el centro de CB, hacia el centro oeste entrerriano, dejando algunos modestos registros, en general inferiores a los 5 milímetros. Esto no impuso una pausa en la cosecha, en todo caso, la misma fue mínima.
El buen tiempo sigue presente en toda la región al menos hasta la jornada del martes, jornada en la cual ya se notaría un aumento de la inestabilidad con desarrollo de nubosidad que gana potencial para dejar precipitaciones. Esta inestabilidad se proyecta a la última jornada de abril. El escenario más húmedo para esa fecha propone lluvias del orden de los 20 milímetros, las cuales si bien interrumpirían la cosecha, serían beneficiosas para reponer humedad superficial y fortalecer el buen escenario hídrico que se presenta para el inicio de la fina. Las temperaturas se mantendrán otoñales, quizá con menor amplitud térmica y con posibilidad de que se concreten nieblas matinales.