03/08/2010
El Consejo Directivo de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos recibió a los Diputados Nacionales Lisandro Viale y Jorge Omar Chemez, con el objetivo de conocer los proyectos formulados por cada uno de ellos referidos al sector agropecuario.
El Presidente de la Bolsa de Cereales, Ing. Oscar Montero dio las palabras de bienvenida en nombre de los integrantes del Consejo Directivo, para dar lugar a la exposición del Diputado Jorge Chemez, quien se refirió a su Proyecto que versa sobre derecho de exportación, la eliminación de retenciones para determinados productos, entre otras cuestiones. El Proyecto de Ley tiene como objetivo contribuir a brindar una solución a la problemática actual de la disminución del área sembrada, de producción de cereales y oleaginosas, así como también fomentar el desarrollo de las economías regionales.
Chemez se refirió a la difícil situación de consenso que hubo entre los legisladores sobre el tema de las retenciones, pero finalmente “llegamos a buen término, ya que hay dando vuelta entre tres o cuatro proyectos”. Y agregó que su propuesta busca un equilibrio entre los legítimos intereses redistributivos, de abastecimiento y fiscales del gobierno, y los también legítimos intereses de los productores agropecuarios que aspiran lógicamente a un horizonte de previsibilidad para la toma de decisiones en torno a la actividad desarrollada y el riesgo asumido que implica.
Chemez expuso que el proyecto permite otorgar previsibilidad a la producción agrícola y aumentar el área sembrada de cultivos como el maíz, trigo, girasol y sorgo, así como desalentar el monocultivo de la soja, para incentivar otros que generen rotación para el mejoramiento de los suelos, y de esa manera evitar el deterioro de los nutrientes del mismo, ya que “exportamos soja y también suelo”. En este sentido, afirmó que el proyecto “es el más razonable, quizás no sea el mejor, no sea lo ideal, pero es el que más se acerca a la urgencia que tenemos que solucionar, ya que de forma urgente hay que generar una medida para parar o dar una señal al productor que está haciendo lo posible para cambiar la situación”. Este proyecto de Ley pretende establecer derechos de exportación cero para los cereales, oleaginosas y economías regionales, con la única excepción de la soja y sus subproductos. En este último caso, y atendiendo especialmente los intereses fiscales del Estado, se prevé una reducción inicial de 5 puntos porcentuales, seguido por un cronograma de reducción de la alícuota hasta su total eliminación en siete años. Este mecanismo se complementa con la posibilidad, instrumentada mediante esta ley, de imputar un porcentaje del precio bruto de venta de la soja para el pago del impuesto a las ganancias y/o los anticipos para aquellos productores que se encuentren en el sistema general de la AFIP. Al mismo tiempo, el proyecto estipula la devolución de un porcentaje del precio bruto de venta de la soja, a los productores por el Régimen simplificado para pequeños productores, a través de CBU.
Reflexionando sobre el Proyecto de Ley, Chemez afirmó “¿Qué buscamos a partir de ésto? Que el presupuesto del productor tenga una respuesta inmediata, utilizar ese dinero y no perderlo, pero vamos a ser realistas tampoco podemos desfinanciar al Estado y por las que el estado tendrá que hacer un ajuste a los otros sectores, tiene que pensar en aplicar impuestos a otros sectores, como por ejemplo a minería, al sector financiero, al sector del juego”.
Seguidamente, tomo la palabra el Diputado Nacional Lisandro Viale, quien planteó su propuesta, haciendo un recorrido histórico y un análisis del sector a partir de diapositivas aclaratorias, afirmando que “no soy tan optimista respecto del tema, porque me parece que estamos discutiendo intereses económicos muy fuertes, y que desde que se inició el conflicto, desde nuestra misión, se inicia en el campo por el grito de los productores genuinos, no me refiero al tamaño en sí, sino a los productores que tiene pertenencia al sector por distintos factores, familiares o de tradición, pero que son productores pequeños, medianos y grandes. Quienes con este nivel de concentración que tienen los pools de siembra o fideicomisos, cada vez se hace más difícil seguir en el rubro que a uno le toque ya sea leche, carne, granos, agricultura”.
Viale se refirió a la concentración que desde 2003 hacia la actualidad ha ido incrementado, y que hoy se está discutiendo, debiendo diferenciar cada una de las partes del campos, ya que “que en el campo todo no es lo mismo y por lo cual no tiene porqué estar en contra de ninguno de los actores sociales, pero si cada uno en términos políticos apuesta o elige sobre qué actor social cree que se debe cimentar la producción argentina”. En este sentido, expresó “desde nuestra perspectiva tratamos, desde el inicio del conflicto, que al pequeño y mediano productor se les brinde las condiciones para que pueda prosperar, ya que creemos que aquí no están las condiciones dadas para que la pequeña y mediana empresa, no solo del campo sino también de la ciudad, prospere. Reafirmamos que el campo es la chispa que pone en movimiento al resto de la sociedad, es un andamiaje que pone en movimiento al país. Es por ello, que estamos preocupados por los niveles de concentración que hay”.
Explicando su posición pesimista de la situación respecto a las retenciones, Viale dijo “uno no es pesimista por vocación, sino por la realidad”. En este sentido, afirmo que “no estamos de acuerdo en apoyar la concentración, no es caprichosa la discusión que se está dando hoy, pero hay que destacar que los medios por un lado informan una cosa, cuando la realidad es otra, o también para no ser ingenuo las entidades y los partidos políticos intentan imponer desde lo mediático una posición que en el fondo no está. Para nosotros no es un problema retención si, retención no, es un problema político dentro del proyecto nacional que no está y que debería estar”.
Viale planteó un diagnostico a través de ventajas comparativas, haciendo referencia al saldo que tenemos con 27 años de democracia, y por ello “no hay que echarle la culpa a ningún gobierno defacto, si aceptar la realidad que nos toca”.