Asi lo dio a conocer la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (SIBER), por lo que en lo que respecta a la soja de primera, el avance en las labores de cosecha se posiciona en el 70% sobre un área cultivada de 1.174.300 hectáreas; mientras que para el caso de la soja de segunda (171.100 ha) se posiciona el 45%.

Según el SIBER, abril se caracterizó por un escenario climático adverso cuyo efectos todavía no han podido cuantificarse con exactitud, no obstante lo que se deduce muy fácilmente es un atraso de un mes para la finalización de la trilla.

"Las pérdidas que se están reportando son importantísimas, no solo por la caída en el rendimiento sino también por la calidad de la semilla obtenida, como así también por los gastos extras de transporte y acondicionamiento. Al finalizar las labores, el SIBER brindará un análisis detallado del rendimiento obtenido y el daño sufrido en la producción entrerriana" indica el informe.

Por otra parte, "existe una seria preocupación en toda la cadena agro productiva porque al día de la fecha no se cuentan con herramientas financieras adecuadas para que el productor pueda afrontar el pasivo de las campañas anteriores y la pérdida económica del presente año".